Controladores aéreos suspendieron el paro del jueves, pero queda otro pendiente

Controladores aéreos suspendieron el paro del jueves, pero queda otro pendiente

Los controladores aéreos decidieron suspender la medida de fuerza programada para el jueves 28 de agosto, luego de ser convocados a una audiencia en la Secretaría de Trabajo.

El Plenario de Delegados de la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (Atepsa) resolvió postergar la protesta, aunque advirtió que las acciones gremiales continuarán el sábado 30 y podrían extenderse durante septiembre si no se alcanza un acuerdo.

De esta manera, la actividad aérea no sufrirá interrupciones este jueves, mientras el sector aguarda los resultados de la reunión con las autoridades laborales.

El secretario adjunto de Atepsa, Marcelo Chávez, aseguró que el paro tuvo un “acatamiento del 100%” y recordó que los trabajadores llevan once meses sin aumentos salariales. El dirigente señaló que el gremio permanece “a la espera de algún llamado” del sector patronal.

Las medidas de fuerza ya habían paralizado la actividad en dos jornadas previas, afectando a más de 44.000 pasajeros y generando un fuerte impacto en la industria aérea.

Por su parte, Aerolíneas Argentinas advirtió que la combinación de cancelaciones y reprogramaciones produce un efecto arrastre que desorganiza toda la red de vuelos. Según la empresa, entre 310 y 330 servicios nacionales e internacionales sufrieron alteraciones en las últimas jornadas.

En los dos primeros días del plan de lucha, la aerolínea estatal reportó 10.500 pasajeros afectados el viernes 22 y 4.400 el domingo 24, sumando 14.900 usuarios perjudicados.

Atepsa reclama una recomposición salarial frente al “deterioro progresivo” de sus ingresos y sostiene que la tarea de los controladores aéreos es “altamente estresante y de máxima responsabilidad”. Actualmente, los salarios oscilan entre $800.000 y $1,5 millones.

La última propuesta oficial, que planteaba un incremento cercano al 1% mensual, fue rechazada por el gremio por considerarla insuficiente.

Las restricciones se aplican en franjas horarias que limitan los despegues y autorizaciones de movimiento en superficie, aunque se mantienen exceptuadas las operaciones de aeronaves en emergencia, vuelos sanitarios, humanitarios, de Estado y de búsqueda y salvamento (SAR).

El conflicto se reavivó luego de que el Ministerio de Trabajo dictara la conciliación obligatoria durante las vacaciones de invierno, medida que solo logró postergar el enfrentamiento. Ahora, la tensión gremial se mantiene y la posibilidad de nuevas medidas de fuerza sigue abierta.

- Advertisement -
Share This Article