El ministro de Economía, Luis Caputo, afirmó este miércoles que la Argentina transita un cambio estructural en su modelo económico, en el que el tipo de cambio ya no debe ser el ancla de los precios y la emisión monetaria dejó de ser el motor de la inflación. En un tono pedagógico y con espíritu de divulgación, el funcionario volvió a ponerse el traje de columnista en el canal de streaming Carajo y repasó las claves del nuevo enfoque del Gobierno.
“Este es un sistema totalmente diferente y opuesto”, subrayó el ministro, quien pidió a empresarios y consumidores “cambiar el chip” y dejar atrás la lógica de décadas en las que la depreciación del peso se trasladaba automáticamente a los precios. Con esa frase, Caputo buscó instalar la idea de que la economía argentina entró en una nueva etapa, donde la disciplina fiscal y la ausencia de emisión marcan el camino.
El mensaje llega en un momento de dudas sobre la sostenibilidad del programa económico, luego de una fuerte escalada del dólar paralelo en julio y una acumulación de reservas que avanza con lentitud. No obstante, el titular del Palacio de Hacienda defendió la consistencia del plan libertario, que apunta a eliminar la raíz de los desequilibrios: “Ya no hay emisión, ni por déficit ni por pasivos remunerados. Eso es lo que nosotros llamamos convalidación monetaria”, explicó.
Uno de los puntos en los que hizo hincapié fue el comportamiento de los formadores de precios, a quienes les pidió no trasladar automáticamente cualquier movimiento del dólar al valor final de los productos. “Va a ser importante el acostumbramiento a nivel empresarial, para que no crean que cada vez que haya esta volatilidad eso se va a precios”, dijo.
En ese contexto, destacó una señal de cambio que ya estaría ocurriendo en el comercio: supermercados que rechazan listas de precios con aumentos de proveedores locales y optan por productos importados más baratos. Según Caputo, esto no implica celebrar el retroceso de la industria nacional, sino valorar la competencia como mecanismo de protección al consumidor.
El titular de Economía insistió en que el éxito del programa no se mide en el corto plazo, sino en la capacidad de sostener reglas claras y eliminar los incentivos perversos que dominaban la economía hasta hace pocos meses. “Fueron décadas en donde ‘garpaba’ sentarse sobre el stock y esperar. Hoy es distinto: los precios no se convalidan por costumbre”, afirmó.
De fondo, el Gobierno busca consolidar un nuevo paradigma, donde el equilibrio de las cuentas públicas, la desregulación del mercado y el fin de los controles de precios constituyen los pilares para una economía ordenada. En ese marco, Caputo volvió a hacer didáctica desde su lugar preferido: las redes y el streaming, donde busca explicar una transformación que, según advierte, ya está en marcha.