Con la llegada del frío, aumentan los cuadros respiratorios en niños y niñas. La Dra. Cecilia Zenteno, pediatra salteña con años de experiencia en consultorio y guardias, explicó en una entrevista con El Tribuno cuáles son las afecciones más comunes en esta época del año, cómo reconocer los síntomas de alarma y qué hacer para prevenir complicaciones.
¿Qué cuadros respiratorios predominan en los chicos durante esta temporada?
Principalmente vemos infecciones respiratorias bajas. Dentro de esas, uno de los cuadros más riesgosos es el síndrome bronquial obstructivo. Se caracteriza por una respiración con dificultad, con un silbido típico, lo que llamamos «sibilancia», y ese quejido respiratorio que preocupa mucho a las familias.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes que deberían alertar a madres y padres?
Lo más común es la fiebre alta, de 38 grados o más, acompañada por tos persistente y dificultad para respirar. Cuando el niño o la niña está muy decaído, no quiere comer, está quejoso o irritable, son señales claras de que hay que consultar. Es importante no minimizar esos signos.
¿Qué edades son las más vulnerables?
Los más pequeños. Los menores de 5 años son los más vulnerables porque están en pleno desarrollo de sus pulmones y sistema inmunológico. Pero también hay una segunda etapa crítica que se extiende hasta los 10 años, donde los cuadros siguen siendo frecuentes aunque algo más controlables.
¿Qué medidas recomienda para prevenir estos cuadros?
Hay hábitos muy simples y efectivos, como el lavado frecuente de manos, ventilación de los ambientes, desinfección de superficies. Y después están los factores protectores que no se pueden dejar de lado: ellos apuntan a una alimentación saludable, buena hidratación y, por supuesto, tener las vacunas al día, que son fundamentales para prevenir complicaciones severas.
¿La bronquiolitis también es parte de estos cuadros?
Sí, por supuesto. La bronquiolitis es muy común y peligrosa en bebés y niños pequeños, y muchas veces está asociada al mismo síndrome bronquial obstructivo del que hablábamos. Por eso es tan importante no subestimar los primeros síntomas y consultar rápidamente.
¿En qué nivel se incrementaron las consultas en el último mes?
En aproximadamente un 80 por ciento. La mayoría de las consultas son por cuadros respiratorios. Es un dato que dispara un alerta y no hay que pasar por alto.
¿Hay algún mensaje que quiera dejar a las familias?
Sí. Hay que estar atentos, no automedicar, y consultar con el pediatra ante cualquier duda. Muchas veces llegar a tiempo cambia completamente la evolución del cuadro. Y no olvidarse de lo básico, que salva vidas. Son cosas muy sencillas,como el lavado de manos, la ventilación y las vacunas. El invierno es duro, pero con prevención se puede pasar mejor.