Ante la gravedad de la situación, los efectivos no dudaron en actuar. Subieron de inmediato a la madre junto a su niña al patrullero, y dirigiéndose hacia el Hospital “4 de Junio”, mientras uno de los agentes practicaba maniobras de Heimlich adaptadas para lactantes. Gracias a la rápida intervención, la bebé logró expulsar el alimento que obstruía sus vías respiratorias, recuperando su color y signos vitales antes de arribar al nosocomio.
Ya en la guardia pediátrica del hospital, la menor de 3 meses, fue examinada por el personal médico de turno, quienes confirmaron que se encontraba fuera de peligro. La madre de 35 años, del barrio Sáenz Peña, fue informada del estado de salud estable de su hija.
El hecho fue registrado como un acto de auxilio humanitario por parte del personal policial, destacándose el profesionalismo y la celeridad del equipo interviniente.
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