La pena mayor fue para Germán, ex diputado. Ambos fueron hallados culpables de tenencia y distribución de imágenes prohibidas. Durante los alegatos, los fiscales presentaron crudas pruebas de las computadoras secuestradas
El ex diputado del partido Activar Germán Kiczka, de Misiones, fue sentenciado este miércoles a la pena de 14 años de prisión por los delitos de tenencia, facilitación y distribución de material de abuso sexual infantil, mientras que su hermano Sebastián recibió años 12 años de cárcel por tenencia y facilitación de videos de violación en perjuicio de menores de edad y el abuso sexual simple de una adolescente de 15 años.
Luego de tres horas de deliberación, los jueces Gustavo Bernie, Viviana Cukla y César Yaya (subrogante) declararon culpables a los hermanos en uno de los casos que sacudió la historia judicial misionera.
El Tribunal Penal Nº 1 de Posadas dictó el veredicto tras una audiencia que arrancó a las 8.30, en el Salón de Usos Múltiples del Edificio de Tribunales de la capital misionera. Allí la fiscalía pidió 15 años de cárcel para Germán y 12 para Sebastián.
En ese marco, Alejandro Glinka, uno de los fiscales que investiga a los hermanos Kiczka, sostuvo durante sus alegatos en el juicio que los acusados tenían a disposición videos de abuso sexual infantil para «cualquier degenerado».
De acuerdo a lo que relató Glinka, Sebastián le dijo a una adolescente de 15 años que «le iba a tener que sacar la calentura». El representante del Ministerio Público Fiscal destacó que el hombre de 47 años «empujó a la víctima contra una bacha en un gimnasio y le tocó sus partes íntimas».
El fiscal alegó que en la notebook de marca Aser había archivos con nombres perversos como: «Nena castaña de 7 con su tío de 36 años», «Nenita saborea el semen de su papá» y «Le voy a romper el culito».
Martín Rau, otro de los fiscales afirmó que demostraron «la descarga y exhibimos videos de abuso sexual infantil y que en lo personal me dañó verlos«. Rau sostuvo que «esas filmaciones son para satisfacer el apetito de quienes los consumen. También, hay material de zoofilia en muchos casos».