Un joven de 21 años salió a bailar el sábado por la noche a un boliche en de La Banda, en la provincia de Santiago del Estero y no volvió a su casa. Al día siguiente, al ver que pasaban las horas sin noticias de su hijo, su mamá hizo la denuncia por la desaparición y se dio inicio a una búsqueda intensa que se resolvió de la manera menos pensada.
La mujer se presentó el domingo alrededor de las 16 en la Comisaría 8° después de intentar comunicarse con su hijo durante horas, sin respuesta. Según su declaración, después fue a la casa de los amigos con los que el joven había ido al boliche, pero las respuestas que consiguió la preocuparon todavía más.
Los testigos dijeron que el joven se había involucrado en una pelea dentro del boliche y que por ese motivo el personal de seguridad lo obligó a retirarse del lugar.
Cuando el resto del grupo salió a buscarlo, afirmaron haberlo visto hablando con un joven que no conocían y que después desapareció. Otro amigo, en tanto, tenía el teléfono de su hijo en su poder, pero seguían sin tener novedades de su paradero.
La madre, desesperada, recurrió a las autoridades con una foto del joven desaparecido y la fiscal Belkis Alderete ordenó un operativo que estuvo a cargo de la División Búsqueda de Persona y Trata de Personas para dar con su paradero.
Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la Policía aportaron una pista firme en la causa y pudieron determinar que, tras salir del boliche, el joven se había alejado del lugar con otras tres personas: dos mujeres y un hombre.
La reconstrucción del caso llevó a los investigadores hasta un hotel alojamiento en la Ruta 51. Según confirmó el propio encargado del motel, había estado el joven que buscaban alojado en una de las habitaciones durante varias horas con los otros tres jóvenes. El encargado indicó que el chico se había retirado de ahí en un remis, cuyo chofer manifestó que lo había llevado hasta su casa.
La información del remisero fue confirmada por la madre del joven, por lo que se dio por cerrada la investigación insólita.
LNR.-
La mujer se presentó el domingo alrededor de las 16 en la Comisaría 8° después de intentar comunicarse con su hijo durante horas, sin respuesta. Según su declaración, después fue a la casa de los amigos con los que el joven había ido al boliche, pero las respuestas que consiguió la preocuparon todavía más.
Los testigos dijeron que el joven se había involucrado en una pelea dentro del boliche y que por ese motivo el personal de seguridad lo obligó a retirarse del lugar.
Cuando el resto del grupo salió a buscarlo, afirmaron haberlo visto hablando con un joven que no conocían y que después desapareció. Otro amigo, en tanto, tenía el teléfono de su hijo en su poder, pero seguían sin tener novedades de su paradero.
La madre, desesperada, recurrió a las autoridades con una foto del joven desaparecido y la fiscal Belkis Alderete ordenó un operativo que estuvo a cargo de la División Búsqueda de Persona y Trata de Personas para dar con su paradero.
Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la Policía aportaron una pista firme en la causa y pudieron determinar que, tras salir del boliche, el joven se había alejado del lugar con otras tres personas: dos mujeres y un hombre.
La reconstrucción del caso llevó a los investigadores hasta un hotel alojamiento en la Ruta 51. Según confirmó el propio encargado del motel, había estado el joven que buscaban alojado en una de las habitaciones durante varias horas con los otros tres jóvenes. El encargado indicó que el chico se había retirado de ahí en un remis, cuyo chofer manifestó que lo había llevado hasta su casa.
La información del remisero fue confirmada por la madre del joven, por lo que se dio por cerrada la investigación insólita.
LNR.-