Antonio se convirtió en el nuevo eliminado de Masterchef y Donato lo liquidó: “hay que estar a la altura”

Este domingo se vivió una gala de eliminación distinta. La más difícil, tal vez, hasta el momento. Los participantes tenían que cocinar un plato atrás de otro hasta convencer al jurado. Dos subían al balcón y el resto seguía cocinando con lo que quedaba de tiempo y ganas. Antonio no lo logró y, para sorpresa de muchos, se convirtió en el nuevo eliminado de Masterchef.

Con una tristeza que no podía disimular, Antonio dejó su delantal negro sobre la mesada de su estación, ante la desesperada mirada de sus compañeros que no podían creer estar despidiendo al salteño, uno de los favoritos en el certamen.
Si bien a la hora de la devolución fueron lapidarios con él, al momento de despedirlo, el jurado tuvo palabras muy cariñosas para el salteño. Germán se animó a vaticinar que el joven ya había ganado.
UNA CARRERA PARA CONVENCER AL JURADO
El primer desafío de la gala de eliminación consistía en que el jurado encendiera dos luces en un aparato que cada participante tenía en su estación. Los primeros participantes en obtener dos luces en su dispositivo subían al balcón y se garantizaban una noche más.
Para eso tenían que cocinar un plato atrás de otro hasta que el jurado se convenciera. En esta primera parte del desafío, Rodolfo y Aquiles fueron los primeros en lograr lo que parecía imposible, por las exigencias del jurado, y subieron al balcón junto a sus demás compañeros.

Con los dos participantes “salvados”, ahora comenzaba la última prueba de eliminación. Silvana, Antonio y Rodrigo tenían que lograr en 20 minutos un plato que le volara la cabeza a Germán, Donato y Damián. La cosa estaba difícil y el jurado más severo que nunca y a la hora de las devoluciones fueron lapidarios.

Primero fue el turno de Silvana que preparó unos wraps de carne, envueltos en hojas de repollo. El plato no le gustó al jurado, quienes criticaron duramente la elección de ingredientes al combinar ananá con carne. El más duro fue Donato, quien le sugirió a la participante que rezara para que uno de los otros participantes haya cocinado peor que ella.

Después fue el turno de Rodrigo, que con una “empanadas asiáticas”, para no llamarlas gyozas, decepcionó al jurado por el poco relleno que tenían y el mal aspecto del plato en general.

Para Antonio, las cosas fueron igual, o peor, de tensas. El joven presentó un plato de camarones con ananá y tomates, que no convenció para nada al jurado. Además de no encontrarle sentido a la preparación, le criticaron el uso excesivo del orégano.

A la hora de la decisión final, los tres participantes estaban sumamente tristes y no paraban de llorar y abrazarse. El jurado deliberó y anunció que Antonio debía dejar la competencia.
REPECHAJE Y ÚLTIMA OPORTUNIDAD
La tristeza de Antonio puede durar poquito, o no, si es que el joven salteño lograr sortear el repechaje y vuelve a las cocinas de Masterchef.
Esta semana comienza la instancia que le da una nueva posibilidad a los que fueron eliminados para volver al ciclo, y por qué no ganarlo. Delfina, Estefanía, Carlos, Emilio y Agustín son algunos de los cocineros amateurs que pueden reingresar y demostrar que un tropezón no es caída y que pueden ganar el certamen.
LOS ANDES.-

Share This Article