Personal de Infantería tuvo que dispersar con gases unas quinientas personas que habían sido convocadas por las autoridades municipales prometiendo asistencia a familias inundadas, sin embargo todo terminó con destrozos en el edificio municipal, corridas y la preocupante ausencia del intendente Casalboni.
Según informó el sitio quitilipi.com.ar, después de los 300 milímetros de agua caída en los últimos días, este lunes por la tarde, damnificados por las inundaciones en distintos puntos barriales de la ciudad de Quitilipi, reclamaron la falta de respuesta frente al municipio y mostraron su indignación con las autoridades, haciendo notar que no eran piqueteros.
Luego, un grupo ajeno de personas reaccionó violentamente causando destrozos en distintos sectores del edificio municipal y, ante la tensa situación, personal de la Infantería policial tuvo que intervenir con gases para despejar la zona. La mayoría de los comercios ubicados en las cuadras cercanas a la Municipalidad, atemorizados, se vieron obligados a cerrar sus puertas.
Los hechos
En las primeras horas de la tarde de este lunes, un grupo de personas que se hallaba frente al portón de la Municipalidad quitilipense, por calle Mendoza, reclamaba atención insistentemente hasta que terminaron derribando el portón, ingresaron al patio y se apoderaron de mercaderías para asistir a inundados que había en una camioneta.
Todo esto fue grabado y subido a las redes sociales por personal municipal, y denunciado – por el mismo intendente Carlos Casalboni – en otro medio periodístico.
Quisieron aportar pero no fueron tenidos en cuenta
Representantes de varias instituciones y concejales, ante la complicada situación, convocaron a una reunión de emergencia e invitando a las autoridades municipales.
La misma se llevó a cabo en la Cámara de Comercio local donde, lamentablemente, los presentes no pudieron arribar a ninguna solución; ya que las autoridades del municipio brillaron por su ausencia.
Por otro lado varias de las personas que están con agua en sus hogares, se mostraron ofendidas con un funcionario provincial que visitó Quitilipi reuniéndose con algún movimiento social.
Éste habría bajado asistencia que se mostró a través de las redes sociales, pero nada para el resto de los damnificados, causando un gran malestar entre las personas que están padeciendo el embate climático desde hace varios días.