Logró cobrar importancia en uno de los torneos más importantes del tenis, pero a él solo le interesa el rédito económico.
Quizás en el fútbol es más normal que muchos que tienen talento de sobra para jugar en un equipo no sean tan fanáticos del deporte, pero hay otras disciplinas dónde esto es aún más llamativo. Es que este jugador de Tenis no disfruta para nada de la cancha salvo que haya un buen dinero para convencerlo de participar.
Alexander Bublik, proveniente de Kazajistán, logró sorprender a propios y extraños con su gran participación en Roland Garros, dónde logró meterse entre los ocho mejores del certamen. Pero aún más llamativo es que este jugador no tenga ningún interés por la gloria deportiva y todo pase por lo económico.
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El controversial tenista que no disfruta jugar, pero si los billetes
Este profesional del tenis ha destacado por varias cosas. Su gran altura, ya que mide 1.96 metros, lo hacen destacar bastante, pero a eso hay que sumarle su irreverente actitud en el campo de juego. Por si eso no alcanza, llegaron las declaraciones que confirmaron que es uno de los casos más particulares del circuito.
“Odio el tenis con todo mi corazón. Odio todos los días tener que jugar», reveló Bublik en una reciente entrevista concedida a L’Èquipe. «Solo juego por dinero. Si no hubiera dinero en juego, me detendría de inmediato”, sentenció el kazajo, quién sorprendió a todos con esta declaración.
A pesar de su mentalidad anti tenis: Bublik llegó a los cuartos de final de Roland Garros 2025
Blublik inició su recorrido en Roland Garros 2025 con un triunfo por 6-2, 6-4 y 6-4 ante James Duckworth. Luego, en la segunda ronda, despacharía a Álex de Miñaur y en la tercera superaría a Henrique Rocha. Ya en la cuarta ronda, aplastaría a un top ten del ranking ATP como Jack Draper (5º).
En cuartos de final, al oriundo de Kasajistan le tocaría contra uno de los máximos candidatos y el mejor del tenis en el ranking ATP, Jannik Sinner. Fue derrota 1-6, 5-7 y 0-6 ante el italiano, quién caería en la final ante Carlos Alcaraz. Finalmente, Alexander no disfrutará mucho el deporte que práctica, pero ha demostrado tener talento para afrontar distintos desafíos.
Ambito.-